HEAVEN AND EARTH
«Dig»
(Croshal Entertainment Group)
Ya han pasado varios años desde la edición de la última placa de Heaven & Earth, “A Taste of Heaven”, y aún más desde la primera homónima, la cual tuve el placer de comentar.
“Dig” me trae no solo una producción que mantiene el nivel de excelencia que Stuart Smith ya me había demostrado en todos sus discos anteriores, pero además en esta ocasión con una notoria solidez.
Primero porque ya cuenta con banda estable conformada con Joe Retta en voz, Chuck Wright tras el bajo, Arlan Schierbaum (teclados) y su compañero de ruta desde los comienzos de esta aventura Richie Onori, en batería.
Smith evidencia un claro interés en proyectar un sonido clásico, sin demasiados rebusques en cuanto a la composición musical, pero sí viendo de darle cierta complejidad a su labor en particular.
Él siempre se declaró admirador de Richie Blackmore, y busca asimilar esa corriente en su manera de tocar, pero paralelamente tratando de poner sello personal a su sonido.
Por eso no es nada raro que el compacto empiece con un tema bien tipo Ronnie James Dio con “Victorious”, de base lenta, pero con buena cadencia, donde la voz de Retta es bastante fiel a la ya desaparecida leyenda del metal, con quien había formado Rainbow, junto a Blackmore.
Joe tiene un timbre de voz entre David Coverdale, con un toque de voz gastada, y Sammy Hagar, pero es evidente que logra su propia onda.
La suma de teclados que se exponen más en “No Money, No Love”, sigue con esa onda hard rock británica, de donde el guitarrista es originario, con aires más a lo Whitesnake de la época de Jon Lord.
Era imposible que Stu se contuviese y en “No Money, No Love” ya se manda un pequeño solo de guitarra para demostrar su habilidad con las seis cuerdas.
En “Heaven & Earth” (1998), Stu había contado con una extensa participación de grandes del rock y metal mundial como Richie Sambora de Bon Jovi, pero ya en esta edición no hay invitados, y eso no quita que el mismo SM se mande un guitarreo con efecto vocal muy típico de Sambora en “Waiting for The End of The World”
En “Good Times” se vuelve a notar la influencia de Blackmore en el solo de guitarra.
Y las baladas como “Live as One” no se hacen desear dándole versatilidad a la propuesta, y en esta en particular se puede escuchar una excelente combinación coral.
Si bien este inglés no saca discos cada verano, cuando lo hace, es porque encontró el punto perfecto en entregar algo que el amante del rock duro va a disfrutar.
Más info en: www.heavenandearthband.com
Lucas Gordon.
